Agua dulce. Un lujo en la Edad Moderna.

   Esta semana tenía programada una charla para el taller de historia local de Alcázar de San Juan sobre el uso del agua en La Mancha durante la Edad Moderna. Evidentemente la situación actual aconseja posponerla, no obstante, aquí dejo un fragmento.

       Herencia, Ciudad Real. 1773.

  " (...) Agua dulce para vender, a causa de ser salitrosa todo aquel terreno. Por cuyo motivo los vecinos que puedan costearlas las costean de dos leguas y media de distancia, con el quebranto que hacen a sus criados y caballerías de las salobres, o pagar dos reales y medio por cada  carga de cuatro cántaros. Y los pobres, que son muchos, se ven presionados a  beber aguas salitrosas sumamente gruesas de los pozos y barrancas de donde se recogen con las lluvias recibidas de las últimas lluvias del terreno en que están retenidas con tan perjudiciales cualidades que luego llega a calentar el sol producen tantos insectos que empezar de un años para otro e consumiéndose las aguas arraigan los estanques abundantes sales (-----) corrosivas y mortíferas. Por lo cual, son muchas y continuas las enfermedades que padecían los pobres por contagio de estas y sus asistentes. Por ser necesario para su curación se deben dulcificar  las aguas en la botica o conducirla de dos a tres leguas de distancia y poder pagarse cuanto parecen muchos. Y los que salen sus enfermedades tienen una convalecencia muy dilatada con atrasos de sus casas y familia(...)".

     Como vemos en el texto, la potabilidad del agua era sin duda uno de los mayores problemas sanitarios en La Mancha, de ahí que en casi todos los pueblos tengamos en la toponimia nombres como Pozoduz, Pozo Dulce, Pozo Nuevo, etc. Para diferenciarlos de los pozos salobres cuya agua se usaba principalmente para el ganado. 

    Tan importante era tener un pozo de agua dulce, que alguno, como el de Quero, fueron elogiados con canciones folclóricas en distintas localidades bajo una misma base de canciones populares. 

 https://www.youtube.com/watch?v=xaUW7P2b7Nc (Camarata Cervantina de Alcázar de San Juan).

 Del folclore de El Romeral:

 Te comiste las peras/ y las manzanas/ y los melocotones/ así te avíes./ ¿ Qué quieres que te traiga/ que voy a Quero?/ Una jarrita de agua/ del pozo nuevo.

 Del folclore de Puebla de Almoradiel:

¡Viva la rosa en el rivel!/Qué quieres que te traiga/ ¡Viva el amor!/ que voy a Quero

¡Viva el verde laurel!/ Que voy a Quero/¡Viva la rosa en el rivel!

   Los pleitos han sido constantes por los pozos. En las concordias de 1224 y 1237 entre las órdenes militares, los pozos eran asunto a tratar para que el ganado siempre tuviese agua independientemente del lugar donde se encontrase o de procedencia. Pleitos tenemos entre Puebla de Almoradiel y Quintanar de la Orden desde el siglo XV,  Quero reclamó el mal uso que se hacía de sus pozos por parte de los ganaderos foráneos en el XVII... 

   Estos pleitos llegarán al siglo XIX en Alcázar de San Juan, siguiendo el trabajo de Jesús Lizcano podemos entrever la lucha de Alcázar de San Juan con Villafranca de los Caballeros (a pesar que en 1675 Villafranca compró parte de lo Pozos Navarro) Alcázar cobraría por el agua de los pozos como contrarréplica al cobro del uso de las lagunas de Villafranca a los alcazareños. También tendremos constancia de estos pleitos entre Campo de Criptana y Alcázar, el primero de los ayuntamientos reclamará el Pozo Albardial allá por el año 1860.

  Las aguas eran tan malas, que Cosme III de Medicci, en su viaje por España nos relata que La Mancha tiene el mejor trigo de Castilla y por ello es el único que se consume en la Corte, sin embargo, el pan tiene mal sabor debido al agua salitrosa.

     

    Ante este panorama los ayuntamientos realizaron prospecciones en busca de agua para sus vecinos, muchos de estos pozos se fueron reforzando con el tiempo el empedrado interior (en Miguel Esteban el empedrado del pozo de Santa Ana, derrumbado, se usó para la construcción de la Iglesia a finales del XVIII) y haciendo grandes gradas y brocales en el siglo XVIII principalmente. (En época de plagas de langosta, está documentado el techamiento de los pozos). El Pozo Grande, conocido hoy como Pozo Pindongo en Alcázar de San Juan, es una referencia para ilustrar las reformas que se hicieron en el siglo XVIII, en esta obra trabajarían en ocasiones más de 40 personas y al acabar la obra de reforma, 4 meses después, se celebró con fuegos artificiales y un refrigerio. Posteriormente se diseñó una cañería que lo uniría a la fuente de la plaza.

 

 ¿Qué tipos de pozos encontramos en la Mancha ( Edad Moderna)?

   Además de dividir los pozos en pozos de agua salobre y dulce, los podemos dividir también por nieve y agua, pero más interesante es dividirlos por su estilo de construcción:

  De noria. El dibujo pertenece a Manzanares, año 1617. En Puebla de Almoradiel también los encontramos en la descripción de la encomienda con el mismo nombre. Solían regar unas 5 fanegas y al estar cerca del pueblo se solían cercar las tierras para evitar hurtos.

 De brazo, se usa para describir los pozos someros en los que el agua está muy somera y se puede conseguir agua sin dificultad. El Toboso en las relaciones de Felipe II o Miguel Esteban en 1725 en la zona llamada Prados están muy bien descritos.

Pozos empedrados y sin empedrar,  de dimensiones mayores y generalmente públicos,  en el artículo de  Pozos de Puebla de Almoradiel se explica.https://historiadoresmanchegos.blogspot.com/2020/05/pozos-de-agua-en-puebla-de-almoradiel.html. Interesante son los pozos y brocales de los castillos y conventos como el de Uclés y Belmonte, donde los brocales son una auténtica obra de arte. En Alarcón, el pozo además de empedrado está cerrado con llave para evitar el uso de éste por gente ajena. Según las visitaciones del siglo XV.

  ¿ Quién y cómo se sufragan estos pozos?

   Los pozos los solía sufragar los propietarios, muchos de ellos eran arreglados por instituciones como La Mesta, los prioratos,... normalmente con uso para la agricultura o ganadería. Pero los dulces, generalmente son del concejo.

   En el siglo XVIII encontramos grandes tensiones por el arreglo de estos pozos y las distintas obras de abastecimiento de agua en cada lugar.  En el último tercio de siglo XVIII, Carlos III dispuso de la figura del Alcalde de Letras, este alcalde tenía estudios y por lo general eran designados por el Consejo de Castilla para ocupar el cargo de alcalde ordinario. Ante las tensiones políticas que se daban entre distintos sectores de la sociedad, pecheros adinerados por un lado e hidalgos por otro, se esperaba de estos alcaldes un gobierno eficiente y no corrupto.

  Estos alcaldes ilustrados intentaron realizar grandes obras en beneficio del pueblo; talleres de costura en Miguel Esteban, en Quintanar una Sociedad de Amigos del País, tuberías y cañería para traer agua de distancias lejanas en pueblos como; Herencia, Madridejos, Corral de Almaguer, La Guardia,... fuentes públicas Alcázar de San Juan,... sin embargo chocaron con los grandes ganaderos de las localidades. Los alcaldes de letras estimaron que las subastas de tierras comunales para el pasto del ganado, estaban infravaloradas. Según el alcalde de Corral de Almaguer, las tierras eran arrendadas por un tercio de su valor real, lo cual hizo que los alcaldes de letras sacaran las tierras a subasta pública nuevamente tras décadas de dejación. El objetivo, era que en la puja se aumentase el montante con el que se harían las obras. En Herencia se acabaría devolviendo parte del dinero a los grandes ganaderos, en Madridejos se llamó a los grandes ganaderos de los pueblos limítrofes y de Tembleque para que presionaran en favor de no hacer la tubería alegando; que con las fuentes se especularía de tal forma que saldría más cara el agua a los pobres. En Corral de Almaguer se llegó a llamar al Prior de Uclés, que durante un mes malmetería contra el dicho alcalde, en Villa de Don Fadrique, los Lara boicotearon incluso la reforma del ayuntamiento y en Alcázar de San Juan, se llegó de denunciar al albañil que hizo la fuente del agua en la Chancillería de Granada.  Como vemos, hay fuerzas reaccionarias al progreso.

   Tras la guerra contra los franceses, todo cambió.  La ganadería lanar sufrió un varapalo y fue poco a poco sustituida por la porcina, la tierra ahora no usada por la ganadería se vendió ( muy baratas y entre concejales muchas veces) en vez de arrendarlas nuevamente para hacer nuevas obras. Así lo vemos en la construcción de las casas consistoriales de Quero o el pozo comunal de Miguel Esteban entre otras obras de la época(Para hacer el pozo nuevo en Miguel Esteban, se vendió 30 fanegas de tierra). Una nueva época e ideas económicas se avecinaba.

  No hay que olvidar, que en el siglo XIX la llegada del ferrocarril traería nuevas maneras de almacenar agua, en altura y en depósitos para surtir de agua los trenes usando la fuerza del desnivel ( aparece la figura de los trenes del agua). A finales del XIX y principios del XX  es habitual que se comiencen a introducir los sistemas de aguas actuales combinados con los pozos comunales de antaño.  

  Por Vicente Torres Encinas.

 Para saber más https://www.colectivoarrabal.com/publicaciones/multimedia/actas-congreso-del-agua/